miércoles, 26 de enero de 2005

Bautizos civiles

Un nuevo engendro burocrático está en marcha, en este caso en el Ayuntamiento de Avilés: Bautizos civiles. Lo que los políticos son capaces de pergeñar con nuestros impuestos es realmente sorprendente. Aunque en este caso no es novedoso, ya que primero comenzó a hacerse en el Ayuntamiento catalán de Igualada.

En principio, tal y como se desarrolla la información no queda claro si es el periódico que tiene ganas de provocar o si dicha expresión ha sido utilizada por la Concejal del ramo, María Victoria González. El hecho es que vienen entrecomilladas las palabras, aunque la propia edil se encarga de matizar que en realidad son "actos de bienvenida a la comunidad". Claro, lo mismo que un bautizo, señora.

Y yo me pregunto. ¿Qué sentido tiene ofrecer una alternativa al sacramento católico? En los matrimonios es entendible porque el Estado está empeñado en regular ámbitos privados y esta institución civil ya viene de lejos, aunque sea una tontería igualmente. Pero los nacidos ya quedan inscritos en el Registro del Juzgado. ¿Entonces? Pues bien, la ociosa burócrata se remonta nada menos que a la Revolución Francesa, una época dice, en la que "se pretendía reforzar la distinción entre Iglesia y Estado". ¡Vaya! Lo importante es, del modo que sea, convertir la maquinaria estatal en competencia de una confesión religiosa y nada menos que pone de ejemplo la época del más siniestro anticlericalismo. Luego resulta que es la Iglesia la que crea crispación social.

Por supuesto, no hay demanda "oficial" de semejante despropósito, aunque "sí consta" el interés de dos familias (¿cercanas a la concejal quizás?) por la ceremonia "sin pila bautismal". El Ayuntamiento buscará "inspiración" en el experimento catalán y no tienen aún ni idea de cómo será la ceremonia.

¿Lo siguiente será la Comunión sin hostia? Allá el que quiera hacer el canelo, pero con su dinero, por favor.

Actualización (28/01/05).- Hasta IU, socio de gobierno del PSOE en Avilés, adopta una postura sensata ante semejante estupidez.

Es cierto: vuelve el fascismo

O para ser más exacto, el totalitarismo de izquierdas, aunque me da lo mismo, porque lo relevante es que estamos ante la negación del individuo.

Y es que nos encontramos con que los propios policías que protegían a Bono admiten que no hubo agresión. Si no hay agresión, no hay delito. Y la noticia la enlazo del mismo periódico que ha tenido la desfachatez de publicar en portada las fotos de los concejales del PP detenidos (secuestrados sería más preciso) sin prueba alguna. Menos mal que Pedro J. es un defensor del garantismo.

Eso es propio de un Estado policial. Espero ahora que los que se llenaron la boca llamando ultraderechistas a colectivos enteros basándose en paranoicas teorías conspiratorias, califiquen en su justa medida la gravedad de lo acontecido con dos ciudadanos, cuyo único delito aparente es aparecer en una foto y ¡¡ser militantes del reaccionario PP!! Esto no se hace ni con los etarras; quizás porque tienen quien les defienda. O quizás porque ellos no crispan el ambiente con sus pistolas. O simplemente porque la calle es de la izquierda y punto.

Espero al menos que esto sirva para que el ambiente social contra el PP, claramente instrumentalizado desde "el acosado" Grupo Prisa y sus adláteres (es decir, prácticamente todos los medios de comunicación y partidos políticos en España), finalice. Porque por mucho que se intente dar la vuelta a la tortilla, hay millones de españoles aguantando estoicamente que se les trate como a perros y pueden hartarse... y cometer la osadía de votar a Rajoy en las próximas elecciones.

Por cierto, los zarandeos, aunque más típicos cuando estamos en una multidud, siguen siendo igualmente deleznables. Pero el relato del impresentable Sr. Bono ha quedado al descubierto.

¿Quién crispa?

Muchas cosas se han dicho ya sobre la manifestación del sábado. Curiosamente, algunos de los análisis más surrealistas parten de quienes la ignoraron primero, quizás porque las víctimas del terrorismo etarra no son tan importantes como los bloggers de Irán. No sé. Pero acabo de leer un comentario que me ha causado una desazón especial. Por venir de quien viene y por decir lo que dice. En fin, me congratulo de que al menos mi capacidad de sorpresa siga intacta. Buena señal.

Para comenzar un sesuda introducción: Resulta que la derecha, para mostrar “templanza”, debe plegarse a lo que digan los nacionalismos periféricos, que como todo el mundo sabe son unos adalides de la moderación y el centrismo tan del gusto de los neo-talantosos.

Continuamos con un análisis sobre “las formas” de los gobernantes del PP en diversos acontecimientos para explicar el hartazgo de los ciudadanos con esa panda de fachas que nos gobernó. ¡Y vaya ejemplos! Desde el Prestige, dónde en la mayoría de los pueblos afectados el PP ganó de nuevo las elecciones municipales y las ayudas administrativas quedaron solventadas en un plazo relativamente breve, mientras los damnificados por el desastre ocurrido en tiempos del felipato aún siguen esperando, hasta la huelga general, dónde tenemos el habitual reproche a Urdaci mientras obviamos el carácter mafioso sindical (que invalida cualquier huelga de este tipo, pues hay coacción) o se olvida uno convenientemente de una señora, María Antonia Iglesias, que dejó en aprendiz al mismísimo Goebbels, pasando por el Yak-42, dónde los que tuvimos familiares muertos sabemos la cantidad de mentiras que Bono ha contado y cómo ha utilizado a las víctimas. Claro que si estuviera gobernando con el PNV y CiU los hechos serían los mismos, pero el análisis distinto, teniendo en cuenta la introducción que mencionábamos.

Pero los ejemplos me parecen muy buenos, precisamente para lo contrario que se quiere mostrar. Y es que son tres casos de evidente manipulación social no ya hacia actos o carencias gubernamentales (en los que yo estoy de acuerdo en muchas cosas, más que nada porque los gobiernos suelen ser entes liberticidas), sino contra un determinado partido político y todo lo que le pueda ser próximo. Troskismo puro, vamos.

Y llegamos al 11-M, claro. Todo el mundo entenderá como razonable sacarlo a colación cuando hablamos de una manifestación de la AVT. Un 11-M marcado por la penosa gestión del Gobierno del PP (en eso no puedo estar más de acuerdo) que a su vez generó, ¡cómo no!... “una movilización espontánea”.

Por supuesto, no se menciona en tan ponderado análisis todo lo ocurrido durante la guerra y tras el 11-M: agresiones (y no intentos) a ministros, cargos y militantes del PP, boicot de actos, quema de sedes con cócteles molotov incluidos... Todo ello en un clima realmente tremendo, que los que militábamos en el PP por entonces conocemos bien, pues las piedras hacen daño. Hechos a la vista de cualquiera que no sea un miserable. Hechos condenados en su momento con palabras tan mezquinas del tipo: “Más mueren en Irak”, “son apenas unos rasguños”, “es el pueblo soberano”... O simplemente silenciados. Grave, muy grave. Los neonazis patean espontáneamente a los negros y no por ello se pasa de puntillas sobre el hecho.

Por el contrario, en plena ensoñación, se nos ofrece una detallada estrategia que no se le ocurriría ni a Rubalcaba. uno de los personajes más siniestros de la España moderna, ni creo se atrevería a suscribir Llamazares, mi totalitario paisano. El resultado de la cual es... la famosa agresión (no sé qué espera el Sr. Gómez para acudir al juzgado de guardia con sus pruebas, pues de momento no hay nada demostrado y se está deteniendo a la gente por el simple hecho de salir en un video, al más puro estilo, éste sí, fascista). Pero como son más papistas que el Papa (a pesar de su destacado anticlericalismo), mantienen posturas que desmiente Bono y no digamos ya Rosa Díez. Pero no les van a estropear un buen análisis, por supuesto. También se obvian las lindezas que Pilar Manjón soltó hacia Aznar (“¡asesino!”) y por las que fue efectivamente, criticada.

Y por fin, señalamos al verdadero culpable de todo: su pesadilla favorita, Federico Jiménez Losantos, que en un párrafo es sacralizador de la Constitución y en otro desligitimador de instituciones. ¡Qué capacidad la de su bestia negra!

Por el contrario, todos los demás medios y todos los demás partidos políticos, no han tenido nada que ver con el clima social creado. La culpa es de quien ha decidido no dejarse pisar la cabeza más, a pesar de ser un minúsculo punto en el dial pero que crece día a día, dando voz a quienes han sido tratados como escoria los últimos meses, y eso molesta.

También es culpable (no podía faltar) Pío Moa, un historiador solo frente a decenas que defienden lo contrario, pero duele que un ex-terrorista utilice las fuentes de la propia izquierda para ponerles en su lugar histórico, avalado además que por Payne (¿otro fascista, quizás?)

Y por supuesto, Ibarreche no pretende saltarse la legalidad vigente; es todo un invento de Federico y otros facinerosos. Hay que callarse, que los nacionalistas tienen bula para montar su proyecto totalitario.

Acebes y Zaplana son los nuevos radicales del PP, por montar el Gal, intentar encarcelar a Puyol... Ah no, que esos eran otros. Bueno, da igual. Por hablar, hombre. ¡Qué se callen, que la derecha no tiene derecho a defenderse de la ignominia!

¿Y la Conferencia Episcopal? Ah, los curas. ¿Quién se han creído que son para defender su moral públicamente?

Incluso tenemos una nota de humor negro cuando se alude al “acoso a la Cadena Ser”. Resulta que el puto amo de España está siendo acosado. ¡Hay que tener la cara bien dura!

En fin, que todo esta amalgama bien organizada, que tiene los resortes del poder, “arrasará el país”. Y se advierte: ¡Hay que frenarlos! ¿Y qué más se les va a hacer? No se me ocurre más que la cal viva.

¿Y tú denuncias la crispación y la fractura social? No había leído nada tan burdo desde que dejé de intoxicarme con Haro Tecglen y los discursos de Fidel Castro. Bonino estaría orgullosa. Has de enviarle tu peculiar punto de vista.

Frente a todo esto, las palabras de un izquierdista que sabe distinguir, Raúl del Pozo:

"La manifestación del sábado en Madrid no iba de fachas; no se vio entre la multitud a esa nueva horda urbana que asola a Europa. Estoy de acuerdo con Constantino Méndez, delegado del Gobierno en Madrid, cuando dice que los bronquistas no eran ultras. Ni ultras ni guerrilleros de Cristo Rey jubilatas que sacaron del trasero de la nostalgia los puños de hierro y las brijas de matar rojos.
"Algunos cronistas, llevados por la pereza mental o porque son jóvenes y no han visto cómo las niñatas con zapatos de charol rompían con bates las cholas de los manifestantes en los años 70, tienen el numero de la bota cambiado. El viejo vientre inmundo sigue siendo fértil, pero no confundamos a los bombers con los domingueros.
"Era la derecha, idiotas. La derecha que empieza a embestir, que ha dejado de ser mansa, callada y paciente. No eran las ramas de abedul con el hacha ni filofascistas de Ultra Sur, ni comandos skins con las botas de pisar boqueras, lilas o mojamés, sino un amplio espacio de malestar que la derecha española está ocupando, después de quedar fuera de juego el 11-M. Estaban muy encabronados y buscan su pancarta.
"Los responsables de prensa de los partidos políticos -de derechas, de izquierdas, de centro- tienen muy en cuenta a Goebbels y su propósito no es dar información, sino hacer la guerra. Ahora la guerra no es de centurias sino de encuestas y de intención de voto. Los dos partidos se han apresurado a informar que los incidentes fueron aislados, de violentos, de fanáticos. Yo pienso que el PP se endurece en un país dividido y se acuerda de cuando le quemaban las sedes y les llamaban asesinos. Ahora llaman a José Bono, al PSOE, asesino, apóstata, cobarde y defensor de maricones. Y a este paso, volvemos al Puente de los Franceses. Pero no era ésa la cabeza de la serpiente. La culebra está aguardando a la patera."

lunes, 24 de enero de 2005

Profesionales de la manipulación

Ya se ha comentado suficientemente por aquéllos que estuvieron allí y hablan de primera mano. Pero ante las reacciones de corte netamente estalinista que se están produciendo en casi todos los medios, conviene insistir en algunos aspectos de lo acontecido en la manifestación del pasado sábado.

Comencemos por lo más grave: el intento de agresión a un Ministro es un hecho repugnante. Como bien dice Juan Ramón Rallo, hay un principio fundamental: “nadie puede iniciar la violencia contra otra persona”. Punto y sin ningún “pero”.
Eso sí, creo que los abucheos no pueden ser equiparados a un intento de agresión. Se puede estar de acuerdo o no, y yo creo que estaban totalmente fuera de lugar (sobre todo cuando van dirigidos hacia personas que estaban allí, por los motivos que fuera, pero estaban allí, haciéndose eco del llamamiento de las víctimas, que es lo importante), pero son totalmente legítimos. Una agresión inicial NUNCA.

Luego ya comienza lo esperable. A mentir y sembrar odio, que es su profesión. Resulta que “intentaron agredir a los representantes del Gobierno y del PSOE”, vamos que como decían esos amantes de la libertad, el sábado se “provocó el terror en las calles de Madrid”. ¿Es necesario exagerar para criticar duramente un hecho deleznable?

Pues parece que sí. Como primer paso para luego señalar a los culpables directos, que no serán las personas individuales que lo hicieron, sino el PP y ciertos medios (¿adivinan cuáles?) con la connivencia de la ¡AVT!, que está infiltrada por ultraderechistas. Y lo hacen los mismos que en su momento trivializaron sobre las agresiones a los líderes del PP y a muchos de sus afiliados a lo largo de toda la geografía española; los mismos que no decían nada cuando se lanzaban piedras y ¡cócteles molotov! contra las sedes del partido gobernante (y cuando decían algo, era para ladrar un “se lo merecían”); los mismos que no dijeron nada cuando Manjón llamaba “asesino” a Aznar… Su ignominia no conoce límites. No les basta con ningunear a las víctimas con ausencias clamorosas, también hay que insultarlas, aprovechando la disculpa que les ha proporcionado unos impresentables.

Afortunadamente, sí hay personas decentes y admirables como Rosa Díez, que no tienen necesidad de mentir ni exagerar, seguramente porque su dignidad y su experiencia de batalladora incansable se lo impide. Su relato de los hechos es clarificador (y digno de compararse con el de Bono, por cierto): eran “un grupúsculo de unos diez o quince que vociferaba con mucha violencia y otro más numeroso que contrarrestaba con aplausos”. Sabe de lo que habla; ha hecho de la lucha contra el totalitarismo su profesión. Así que dejen los manipuladores de usar a esta insigne mujer para referirse a unos hechos ya de por sí suficientemente lamentables.

Por cierto, aprovechando todo esto y ante una escasez de ideas y un resentimiento que les delata, otros incluso nos señalan a nosotros. Somos los nuevos desestabilizadores. Me temo que su envidia les hace concedernos una importancia desmedida. Pobrecillos. Ahí tenemos a los guardianes de las esencias del liberalismo en estado puro olvidando que la responsabilidad de unos actos es necesariamente individual y achacable a sus protagonistas directos.

martes, 18 de enero de 2005

Consecuencia lógica

El CGPJ a veces tiene un arranque de análisis riguroso. Es una consecuencia lógica, en la que los amantes del positivismo legal no quieren pensar. Baste ver a la minoría progresista, que basa sus interpretaciones en "la multitud de leyes autonómicas que reconocen las uniones de hecho homosexuales". Vamos, que si multitud de leyes autonómicas reconociesen que los miopes no tenemos derecho a expresarnos, a callarse tocan.

Dado el fervor estatista que nos inunda, podrían buscar otra figura jurídica que proteja esas uniones tan demandadas. Ah no, que tenemos el caprichito de llamarnos "matrimonio". Y los musulmanes con su harén también; ¿qué pasa?

¿No es más fácil (y desde luego más justo) que el Estado se desentienda de las uniones voluntarias de una vez? ¿O seguiremos defendiendo que "mientras tanto" legislemos para evitar las discriminaciones?

Pero nada, se dirá que es una interpretación reaccionaria. Y asunto resuelto. Con mucho talante todo, eso sí. Como siempre.

viernes, 14 de enero de 2005

Los ayatollahs no podrán con internet

Reproduzco el llamamiento que JJ.LL. realiza en su página. Yo no podré estar en Madrid, pero el que pueda...


Sábado 15, 12:00 h. / Protesta contra la censura iraní de los blogs

Ayer nos hicimos eco del bloqueo por parte de las autoridades iraníes de servicios de internet para la creación de blogs. En JJLL, jóvenes, internautas y bloggers, sentimos como algo muy nuestro este ataque a la libertad de expresión e información de los jóvenes internautas y bloggers iraníes. Y si las autoridades iraníes quieren bloquear el acceso a internet, nos tendrán en las calles frente a ellos.

El próximo sábado 15, a las 12:00 del mediodía, convocamos a nuestros asociados y simpatizantes, a internautas, y a todos los amantes de la libertad, a concentrarse pacífica y cívicamente ante la embajada de Irán en Madrid, en la calle Jerez, nº 5, para hacer público nuestro más absoluto rechazo a este ataque a la libertad individual.

Como nuestros compañeros liberales ya hicieron en Polonia, saquemos nuestras pancartas anaranjadas para reclamar libertad de acceso a Internet; libertad de información; libertad de expresión; libertad de prensa; libertades políticas e individuales para los iraníes, como víctimas más recientes de la censura y el control de los medios de información por parte de un gobierno liberticida.

Porque ahora son los iraníes, pero un día podriamos ser nosotros, salgamos a la calle para defender la libertad de personas a las que recientemente se ha cerrado una gran ventana al mundo.

Si quereis más información, podeis escribir a gabriel@juventudesliberales.org

jueves, 13 de enero de 2005

Más sobre la eutanasia

No coincido hoy con mi estimado Javier Neira. Nadie está “animando a la muerte” por defender el derecho a decidir sobre la propia. Esto nos llevaría de nuevo al desgraciadamente eterno debate entre legalidad y moralidad.

Yo no defiendo la eutanasia; antes al contrario. Pero mi interés no es defender mis legítimos postulados morales, sino hablar de derechos, materia de la que debe ocuparse el liberalismo.

Ayer me enteraba de la nueva página del genial Paco Capella. Él analiza de forma sencilla e impecable los fundamentos éticos al respecto. Lectura imprescindible.

martes, 11 de enero de 2005

Amor frente a Estado

Ayer te vi. Y sentí emoción.

Algunos advierten hoy en sus titulares que esperaste a que prescribiera el “delito” de colaboración necesaria al suicidio antes de reconocer que pusiste el vaso a mano. Lógico, con el Estado hay que andarse con ojo. No tiene piedad; lo suyo es legislar para jodernos la vida y prohibirnos a nosotros mismos hacerlo. Infame, sí. Pero real.

También te reprochan que hubieses elegido el cianuro, quizás influidos por esa manía de llamar “derecho a una muerte digna” a lo que simplemente es derecho (el primero de todos) a disponer de la propia vida, y olvidando que esa decisión no fue tuya.

Hoy te volví a ver. Y sentí admiración.

Tuviste que oír como te llamaban asesina por haber realizado un acto de amor. No encuentro otra manera de referirme a lo que has hecho: respetar la decisión más trascendental de alguien a quien se quiere, siendo la “colaboradora necesaria” en el momento más oportuno.

Y todavía se reflexiona sobre la conveniencia de que sea el Estado el que realice esa “colaboración necesaria”. Acabaría colaborando cuando no debe. ¡Qué pavor!

Baste ver a la Ministra de Sanidad, Elena Salgado, aprovechando la corriente para afirmar que la culpa del clima creado es de la Iglesia. Tienen el poder coercitivo y encima se ríen de nosotros. La paciencia tiene un límite.

Paradoja Intolerable

En un editorial, El Mundo califica de paradoja que Ignacio de Juana Chaos, piltrafa humana donde las haya, pueda permanecer más tiempo en la cárcel por sus amenazas que por sus 25 asesinatos.

Si por paradójico entendemos opuesto al sentido común, no puedo estar más de acuerdo. Pero yo voy más lejos. Porque es ciertamente intolerable no ya la superioridad de la condena por las amenazas, sino el hecho mismo de que sea delito expresar opiniones, por muy desagradables que éstas resulten a los oídos de las víctimas.

Pero intolerable también sería que este cerdo pisase la calle mientras las víctimas no sean reparadas; y sin entrar en detalles, nunca podrán serlo si ni tan siquiera se arrepiente.

Que se pudra en la cárcel, sí. Pero no mantenido con mi dinero. Que le alimenten sus compinches o que se muera de hambre.

Al final, habrá que refugiarse en la Justicia ¿sin Estado?

lunes, 10 de enero de 2005

Patente de judeófobo

A través de un comentario a otro post, llego a un artículo del inefable Arturo Pérez Reverte publicado en El Semanal.

Con su habitual falta de comedimiento, larga contra todo lo que se mueve. Pero maldita la gracia que hace su modo de referirse a los judíos y a los americanos.

Para eso no es necesaria patente de corso alguna; desgraciadamente es demasiado habitual.

Odio a la libertad (de comercio)

No por recurrentes algunas noticias dejan de ser más sorprendentes. El Gobierno del Principado de Asturias se congratula de poder reducir a ocho los días de apertura en domingos y festivos. Eso sí, "ha sido fruto del consenso"; consenso producido entre representantes políticos, sindicales, comerciantes y usuarios.

Ante esto, ingenuo de mí, yo me pregunto quiénes son los que verdaderamente deben decidir sobre estos aspectos. Parece ser que estamos de acuerdo en que comerciantes y usuarios tienen algo que decir al respecto. Pero no se trata de sentar en una mesa a unos representantes de la nada, pues yo al menos, no estoy representando en parte alguna. No sé quiénes han sido los voluntarios que se han sentado en mi nombre, pero desde luego hablaban sólo por sí. Usuarios y comerciantes se ponen de acuerdo de forma mucho más simple. Los primeros irán a comprar cuando les apetezca si los establecimientos están abiertos y los segundos, avaros ellos, abrirán siempre que les resulte rentable. Este acto en libertad resulta intolerable para muchos, dispuestos a decidir cuando he de poder ir yo a un centro comercial (pues ahí reside el problema).

¿Argumentos? De todo tipo: desde el totalitario no tienes por qué ir a comprar un domingo teniendo toda la semana para hacerlo hasta el cínico los trabajadores tienen derecho a descansar esos días (le preguntas a tu interlocutor si eso incluye a los camareros que le atienden en su día de ocio, a los taquilleros de los cines o a los conductores de los llamados servicios públicos y su contestación es un eso es distinto).

Aún más espeluznante es comprobar que dentro del consenso entran representantes políticos y sindicales. Los primeros están siempre allá dónde se perpetra cualquier acto liberticida; no iba a ser menos en esta ocasión. En cuanto a los segundos, hacen gala de su poco amor por los actos libres y la representación fiable. Que yo sepa, y esto es definitivo, a nadie se le obliga a aceptar un trabajo determinado, que requiere (como tantos otros, por cierto) trabajar los domingos y festivos. Sin embargo, con estas leyes evitamos que personas dispuestas a hacerlo, por las razones que sean, no puedan debido a iniciativas legislativas netamente socialistas como ésta.

¿Argumentos? Darle voz a la sindicalista de turno produce vergüenza ajena. Pero es inevitable. Así: “la liberalización de los horarios comerciales no es la solución a los problemas de sector” (claro, la solución es que deje usted de comportarse como una ungida y los actores sean libres para solucionarlos. De haberlos). O: “la competitividad pasa por la formación de los trabajadores y no por convertir al sector en la ley de selva” (¿cuál será la manida “ley de la selva”? Quizás la libertad, no sé.). También tenemos la habitual defensa del pequeño comercio, perjudicado por las grandes superficies (típico argumento reaccionario y falaz, pues la competencia hace que los pequeños tengan incentivos para aprovechar las ventajas que sin duda tienen sobre los grandes, como la atención personalizada sin ir más lejos)


Y para premio: la Universidad de Oviedo desarrolló el Estudio sobre el impacto de la liberalización de horarios comerciales en el comercio de Asturias, cuyas conclusiones sirven para pergeñar atrocidades como la mencionada. Conclusiones como que en el Principado “se perjudica a 68.000 trabajadores, de los cuales unos 1.526 podrían perder su trabajo en un año ante la apertura masiva en días no laborales”. Se obvian los nuevos empleos que se producirían de haber libertad de comercio real.

El político, para terminar, ávido por mostrarnos su vena intervencionista, nos comenta que adelantar las rebajas a la festividad de Reyes “no es un tema demandado”. Ocioso sería preguntarle cómo lo sabe el muy…

miércoles, 5 de enero de 2005

Las fuentes adecuadas

En un post reciente, comentaba la falacia de equiparar "valor de tasación" con "precio de venta", pues no tienen relación directa, hasta tal punto que puede bajar el primero y subir el segundo. Y dejaba una pregunta, reiterada en los comentarios: ¿Quiénes son las fuentes adecuadas que nos pueden ofrecer fiabilidad para estudiar una evolución en el precio de la vivienda?

Obviamente tan sólo aquéllos que intervinen directamente en las transacciones, con información directa. Aspecto éste fundamental, dado que los precios reales siempre están "escondidos" por diversos motivos que creo no escaparán a nadie. Me refería , en definitiva, a los agentes de la propiedad inmobiliaria en toda su extensión, pues estamos ante un sector liberalizado.

Como es lógico, algunos por aquí han notado las mismas sandeces que yo y han respondido. No es éste más que un ejemplo que plasma una obviedad: las sociedades de tasación no pueden realizar estudios creíbles sobre los precios de venta reales. Esperemos que los medios de comunicación dejen de hacer el ridículo plasmando esos informes.

Dicho lo cual, es necesario matizar que no necesariamente la información que ofrezca el sector inmobiliario es cierta, pues les puede convenir arreglar las cifras por propio interés. Pero eso sería otro asunto.

José Luis Moreno, ¿casposo o liberal?

Licenciado en varias disciplinas académicas, entre ellas neurocirugía (de lo que además ejerció), ha estudiado también canto, piano y violonchelo (creo), y domina varios idiomas. Proveniente de una familia modesta, su padre tenía un espectáculo de títeres en El Retiro madrileño. Ha actuado delante de, y con, los más variados artistas y personajes (la Reina de Inglaterra, por ejemplo), con sus inolvidables muñecos. Hace ya varios años que se dedica a su labor de productor de distintos espectáculos. Datos objetivos de los que debería partir cualquier análisis de este inefable personaje.

Hoy me animé a ver Las Cerezas, el programa con el que Julia Otero ha visto premiada su fidelidad a la causa del “talante” que nos gobierna, mal que nos pese a algunos. Y lo hice porque entrevistaba a una mujer cuya voz me emociona sin remedio, la maravillosa Ainhoa Arteta (también criticada por tener la osadía de dar a conocer el bel canto al público generalista, con el consiguiente incremento de la demanda.) Allí me encontré con una entrevista simultánea a esta excelsa artista y al mencionado Moreno.

Pues bien, nada más verle me vine al ordenador a escribir de inmediato, pues recordé la cantidad de sandeces (éstas sí casposas) que sobre este polifacético hombre se han dicho. Y es que muchos (no sólo desde la izquierda, por cierto) le convirtieron en la bandera de la política cultural del PP por su programa de los sábados, Noche de Fiesta o algo así.

Me pregunto en primer lugar dónde están ahora esos finos analistas, tras comprobar que los “talantosos” responsables actuales del ente público han vuelto a confiar a la productora de Moreno el programa de la pasada Nochevieja.

Pero sobre todo, me gustaría saber por qué no se tiene en cuenta que este individuo es quizás el productor más polifacético del panorama español, pues sus apuestas pasan por el teatro, los musicales, el cine, los espectáculos y series de televisión, la ópera y un largo etc. Por si alguien no se ha enterado todavía, es el productor de la desternillante serie Aquí no hay quien viva, por ejemplo.

Y además, y esto es quizás lo más relevante, lo hace arriesgando su dinero, actividad inédita en la piel de toro. Pero en este país, que se llama España (aunque no por mucho tiempo, me temo), las loas se las lleva Almodóvar, incapaz de hacer nada sin utilizar el dinero de quien luego desprecia. Pues yo me congratulo de que todavía existan personas como Moreno, que no olvida en ningún momento que los protagonistas de cualquier espectáculo son los consumidores y que a ellos hay que dirigirse y amoldarse.

Si para muchos es un casposo por el mencionado programa, yo me quedo con el liberal que desprecia el papel del Estado en el desarrollo de la labor cultural.

lunes, 3 de enero de 2005

Valor de Tasación y Precio de Venta

Efectivamente, parece obvio que el precio de la vivienda sigue aumentando. Y no pretende ser este comentario una necesaria aclaración (que dejaremos para otro momento) sobre el por qué de ese incremento incesante.

Lo que quiero hacer notar es lo baldío, por no decir falaz, de ciertos estudios y análisis. Comencemos explicando, así sea someramente, cómo se gesta una operación hipotecaria y, concretamente, qué papel juega en ella una sociedad de tasación.

Cuando alguien decide comprar una vivienda, suele acudir a una entidad de crédito para obtener la financiación necesaria (si es que la necesita), bien directamente bien subrogándose al préstamo del promotor. Como es de sobra sabido, los bancos prestan el dinero con una garantía hipotecaria, habitualmente sobre la vivienda objeto de la transacción, por lo que proceden a valorar el “precio de mercado” del inmueble en cuestión.

Para esto acuden a las sociedades de tasación, entidades independientes (o no tanto, habida cuenta de que muchas de ellas están participadas por las propias entidades crediticias) que emiten un informe técnico y adjudican un valor de tasación o valor hipotecario a la finca en cuestión. Básicamente, el informe se obtiene por el método de comparación y está sujeto a unas normas legisladas previamente.

Pues bien, cualquiera que conozco mínimamente todo este mundillo, sabe perfectamente que el valor de tasación es (prácticamente) siempre superior al precio de venta, esto es, aquel en que uno compra y otro vende, hasta el punto de conseguir, en algunos casos, comprar el inmueble y financiar todos los gastos inherentes a una operación hipotecaria con tan sólo el 80% del valor de tasación.

Teniendo en cuenta todo esto, causa perplejidad que se tomen en serio informes de las casas de tasación referentes al precio real de la vivienda (no digamos ya de sus previsiones para el futuro), precio que desconocen por completo hasta las propias entidades de crédito, pues muy raramente coinciden precio de escrituración y precio real de venta.

¿Es entonces imposible averiguar de forma fehaciente dicho precio? En absoluto, siempre que las fuentes sean las adecuadas. Y éstas no son ni los bancos ni las tasadoras. ¿Alguna idea?