viernes, 23 de julio de 2004

Javier Neira

Gracias a sus Cien líneas diarias (de lunes a domingo, salvo en agosto, en La Nueva España) muchos asturianos se acercan al liberalismo, pues siempre tiene presente al individuo y su innata libertad este genial periodista, lector y admirador de Hayek (podía resaltar otras cosas, pero ésta en especial me atrae). Además de eso, de vez en cuando podemos disfrutar de su indiscutible capacidad como entrevistador. Toda una gozada en esta bella tierra de subvencionados profesionales; en la que la clase política, haciendo gala de su profesión, apenas se distingue en su socialismo. Es además, un gran conversador y un sagaz analista de la actualidad, regional, nacional e internacional.

Hoy ha escrito un maravilloso artículo, no apto para los que no acaban de ver lo obvio: Israel se defiende.

9 comentarios:

narpo dijo...

Si, a mi siempre me gustaba su columna, aunque hace mucho que no le leo...
Ahora en vacaciones que vuelvo a tenerlo en papel ;)

Daniel Rodri­guez dijo...

Coñe... ¡pues ya podías alabarle a más distancia de agosto! Ahora le voy a coger gustillo a las columnas justo cuando me las quiten. ;-)

El Salmantino dijo...

Jeje. La espera hará que te sepa mejor en septiembre.

El Salmantino dijo...

Precisamente en vacaciones no le tendrás, Narpo. Así que acostúmbrate a leerle en su versión electrónica. ;-)

El Salmantino dijo...

Tus palabras, éstas sí, fascistas a fuer de estalinistas han sido borradas de este sitio, pues al ser yo su administrador, yo decido, aún a sabiendas de que la escoria liberticida nunca entenderéis conceptos tan básicos.

Me he quedado asombrado ante tanta profundidad filosófica de los vice-no-sé-qué.

Juan Luis Nepomuceno González dijo...

No sé si se publicará este comentario o si será aniquilado y apostillado con insultos, pero me voy a permitir dar mi opinión. Creo que el Señor Neira basa su columna diaria en las "investigaciones" de "El Mundo" o en los sermones matutinos de Losantos. Cuando no es para elogiar a De Lorenzo o a Aznar. Lo que está claro es que se posiciona. En cierta ocasión mandé una carta al director para criticar una columna suya y me la publicaron. Su reacción fue muy liberal, me honró publicando en su famosa columna mi nombre y apellidos y contestando con insultos y acusándome de pertenecer a un frente chekista.
Aquí también veo que al que discrepa se le acusa de estalinista y fascista. Pues bien, la contestación , que basé en datos objetivos, evidentemente no me la publicaron. Un saludo y viva la libertad.

El Salmantino dijo...

Recurso muy infantil ése de "a ver si lo publicas"... Aquí se deja escribir a todo el mundo. Los comentarios se moderan tan sólo para evitar el spam. Y he borrado un comentario de un fascistilla que lanzaba graves improperios contra Gustavo Bueno porque no consiento determinadas cosas, como los insultos sin más argumentación. Dado que (salvo que tú seas el autor) no has podido leer el comentario en cuestión, no opines sobre mis justificadísimos calificativos.

Pero sí, te lo apostillaré, porque sólo faltaba que no pudiese comentar las aportaciones que los demás hacen en mi casa. Si eres un maniático de la última palabra puedes comentar todo lo que quieras y las veces qe lo desees, pero yo contestaré cuando lo estime oportuno.

Neira escribe muy bien, va contracorriente (no es nada habitual hallar columnistas liberales en la prensa) y tiene una línea muy clara desde hace mucho tiempo, en un periódico que, por lo demás, intenta ningunearlo. ¿Que se posiciona dices? Sólo faltaba. ¿Es un delito? ¡¡Y quién no se posiciona!! Pero supongo que lo que te molesta es su posición. Chico, leete a todo el resto de columnistas pesebreros y sáltate la columna de Neira, pero déjanos a los demás leerlo con deleite. Como yo escribiese para mostrar mi desacuerdo con todos los demás, no haría otra cosa a lo largo del día.

Lo que hace El Mundo son investigaciones, sin comillas. De alguien que se despide con un "viva la libertad" yo espero un poco de respeto por la verdad. Y el diario de Pedro J. ha dado sobradas muestras de ser un baluarte en aspectos en que una justicia decente debería ahondar.

Y el Sr. Losantos, para desesperación de los que decís amar la libertad pero la mancilláis constantemente, es una gota en el desierto de la comunicación. Si no os gusta cambiad el dial; yo no escucho la Ser porque no me gusta que me insulten constantemente. Haz tú lo mismo.

Juan Luis Nepomuceno González dijo...

Gracias por dignarse a contestarme aunque de forma arrogante y poco respetuosa con el que discrepa. Yo no mancho la libertad, intento ejercerla, a mi manera claro, no a la suya. Hablando de pesebreros, hay muchos pesebres en las sedes episcopales y en los medios que sustentan. Un saludo.

El Salmantino dijo...

El que entró aquí cual elefante en una chatarrería fue usted. No hay pues arrogancia en mi contestación en la que tan sólo le aclaro algunas de sus insinuaciones.

En cuanto al respeto con el discrepante, deberían revisarse los neoprogres del momento sus modos victorianos. Las formas importan bastante menos que el fondo, salvo para el que pretenda esconder su afán liberticida bajo el manto de la educación y el respeto. No cuela.

Pesebreros hay por doquier. Pero a mí me indignan los que lo son del poder; y éste último sólo es preocupante cuando ejerce la coacción sin motivo. La Iglesia no tiene el poder, salvo el moral para millones de personas, mal que les pese a tantos.